Revelan que niña "cantante" usó playback en apertura de JJ.OO.

Tenía mejor "imagen" que la intérprete real. Fuegos artificiales pregrabados para la TV.

La niña que el viernes pasado encandiló a todo el mundo en la inauguración de los Juegos Olímpicos de Beijing, ataviada con un traje rojo y cantando "Oda a la madre patria", no cantó en realidad ni una sola nota, sino que fue elegida por su aspecto físico, en vez de la cantante real, una niña de cara rechoncha y dientes disparejos. Además, algunos de los fuegos artificiales que tanto impresionaron a los televidentes fueron grabados con anterioridad y "agregados" a la emisión en vivo, mientras que parte del público de los estadios corresponde a barras de "voluntarios" para crear buena imagen y evitar aposentadurías vacías. "Queríamos dar una imagen perfecta y pensamos en lo que sería mejor para la nación", declaró sobre el caso de la cantante el director musical de la ceremonia, Chen Qigang, a la TV china. La niña seleccionada para aparecer ante cámaras, Lin Miaoke, ya había demostrado su talento a la hora de aparecer en público, puesto que había participado en varios espectáculos de TV. La verdadera cantante es Yang Peiyi, una estudiante de siete años que grabó la canción previamente. "Era una cuestión de interés nacional. La niña que tenía que aparecer ante las cámaras, debía ser expresiva", justificaba Chen. "Lin Miaoke es excelente para todo eso. Pero en cuanto a la voz, Yang Peiyi es perfecta. Todo el equipo estaba de acuerdo", añadió el director musical. Chen añadió que la decisión final de que Lin cantara en "playback" se tomó tras un ensayo al que asistía uno de los máximos dirigentes del Partido Comunista Chino (PCCh). Esta revelación se suma a la conocida hace unos días, cuando un periódico publicó que algunos fuegos artificiales que mostró la ceremonia televisada no se lanzaron en vivo. La ceremonia empezaba con una escena en la que aparecían en pleno cielo unas gigantescas huellas de pies que, en teoría, eran filmadas en directo desde un helicóptero. Aunque sí se dispararon los fuegos artificiales, en realidad no eran visibles debido a la bruma de Beijing. El vicepresidente del Comité Organizador de Beijing-2008, Wang Wei, afirmó que la mayoría de las imágenes que se vieron por TV eran genuinas, pero admitió que "puede que se usaran algunas grabadas previamente debido a la mala visibilidad". No es la única "trampa" visual que se ha utilizado en estos juegos. Ayer, los organizadores olímpicos admitieron que en estos días se han desplegado barras formadas por voluntarios especialmente para crear "una buena atmósfera" en ciertos deportes y para que los estadios no luzcan asientos vacíos. Los "fanáticos" llevan camisetas amarillas y han sido vistos en competencias de volleyball, judo y tiro al blanco, entre otras. Imparciales, no toman partido por ningún país en especial y celebran los puntos logrados por todos los participantes. Otro hecho desconocido, previo a la apertura de los Juegos, fue publicado ayer por el "Shanghai Daily". Liu Yan, una bailarina de 26 años que debía interpretar un solo en un acto central de la fiesta, se accidentó en un ensayo y permanece en un hospital, paralizada y a riesgo de no volver a caminar.